Nelson Eduardo Paz Anaya – nelsonpazanaya@hotmail.com 

Desde hace un tiempo, se ha planteado la necesidad de establecer en el Cauca, espacios o mesas de dialogo, a fin de tener una instancia en la cual, se puedan considerar los asuntos relacionados en especial con los conflictos ocasionados por el desordenamiento territorial, que se heredó de la colonia y de los tiempos de la formación de la república.

Indefinición sumada a la carencia de análisis de usos de suelos, gestión de las aguas, deficiencia en las vías terciarias, desintegración de zonas y de municipios, ausencia total en la planeación de la producción agropecuaria, que conduce a dificultades en los costos de los cultivos y en inciertos mercados con precios que asfixian los intentos de lograr avances en la productividad rural.

Todos los sectores agropecuarios producen a pérdida, difícil entender cómo funciona la economía, si el manejo de los costos, tiene que partir de no incluir el interés del valor de la tierra, ni del capital y en cuanto a los laborales, tienen que esconderse bajo un modelo que sacrifica el trabajo.

En contraste se encuentra en las regiones, especies de propagadores, que son líderes en sus cultivos, acumulados de saberes que enriquecen el conocimiento.

Se deben sumar los esfuerzos de quienes pretenden diversificar pretendiendo incluir siembras nuevas, sacrificados por las barreras creadas por los altos costos de insumos y de carencia de canales eficientes de mercado.

Para avanzar en los procesos de ordenamiento territorial, es indispensable elevar la productividad de las cosechas, solo cuando se demuestre que unas pocas hectáreas con buena gestión pueden ser más rentables que latifundios mal aprovechados, se entenderá que la extensión no es la posibilidad, sino el adecuado aprovechamiento.

No puede continuar el conflicto en el mundo rural, la inseguridad está demostrado no se ha podido superar con soluciones de fuerza, ni la del Estado, como tampoco el asentamiento de fuerzas ilegales que pretenden dominar los territorios, porque se impone la razón de los pobladores que demuestran con su laboriosidad, su capacidad de ejercer resistencia y organización comunitaria.

“Discusiones como ancestralidad, títulos coloniales, pre-existencia en los territorios, son denominaciones que en los últimos diez años han aflorado para tratar de explicar el tamaño de nuestros conflictos.”

“Caldono, Buenos Aires, Santander, Silvia, Inza y muchos más son Municipios que hoy tienen en sus agendas de desarrollo la necesidad de acometer salidas frente a los problemas de necesidad de territorio por parte de las etnias y el sector campesino, que a fuerza de luchar avanza en su reconocimiento como sujeto político”.(W. Aldana 2.018)

Todos los procesos de Reforma Agraria en el País, fracasaron porque el gobierno nunca tuvo interés en su desarrollo. Según la mayoría de los escritores de la historia económica de Colombia, sigue siendo la tierra el origen de los más generalizados conflictos.

No fue cosa del azar el hecho de que el primer punto del Acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera, así se presenten todas las discusiones sobre su texto y sobre su implementación, cumplimientos o no, fue la Republica de Colombia, la que firmo establecer ”Que los planes y programas acordados como parte de la RRI deben tener un enfoque territorial, diferencial y de género que implica reconocer y tener en cuenta las necesidades, características y particularidades económicas, culturales y sociales de los territorios, de las mujeres en todo su ciclo vital, de las comunidades rurales y de grupos en condiciones de vulnerabilidad, garantizando la sostenibilidad socio-ambiental”.

En parte el ocultamiento de un desorden real, no da salida a una solución concreta, porque tampoco corresponden a estrategias efectivas.  La dirigencia política del Cauca no ha sido diligente en atender estas situaciones, dejando en los niveles nacionales la responsabilidad ante los conflictos, por ello se han tomado en muchas situaciones, decisiones equivocadas.

En el Cauca, según fuentes institucionales, se pueden contar más de dos cientos conflictos, que subyacen creando inseguridad y atraso en la posibilidad de mejores condiciones de producción.

Los recientes conflictos, entre los diversos sectores por la tenencia de la tierra, y agudizada la situación por la violencia presentada entre comunidades indígenas, que no puede verse como algunos pretenden, “peleas entre indios”, debe dimensionarse como una delicada situación que afecta la estabilidad de todo el departamento.

Es urgente hacer un llamado a las partes en conflicto, en el entendido de que no se trata de desconocer las razones que acompañan a cada comunidad, pero si pedir a sus autoridades y organizaciones territoriales,  recurrir al dialogo, a fin de evitar la intromisión de actores ajenos y de otros intereses.

La reunión adelantada con la presencia de más de veinticinco parlamentarios, sin los ministros invitados, con contundentes pronunciamientos de los Congresistas Caucanos que asistieron, para analizar la violencia en el Cauca, se constituye en punto de partida para visibilizar esta situación.

Se debe resaltar la presencia y la posición del Señor Gobernador del Departamento, Doctor Oscar Campo H., su exposición fue contundente resumen de la situación real, su visión clara y concisa, hizo de su mensaje despejada  convocatoria para pensar el Cauca, sin equivocaciones.