La Guardia Indígena propició la libertad del empresario y directivo del Instituto Técnico Superar, ITS, Jairo Onofre Jurado de 50 años de edad, en zona rural de Tacueyó, municipio de Toribío límites con Corinto, al norte del Cauca.
El ciudadano había sido secuestrado el pasado 28 de diciembre de 2018 junto a Edward Mauricio Bucheli López de 40 años de edad, con quien se desplazaba hacia Corinto a efectuar labores propias del Instituto.
Hay tres personas capturadas que serán sometidas a la Jurisdicción Especial Indígena, pero también son investigadas en la justicia ordinaria por el delito de secuestro extorsivo y homicidio agravado.
La víctima dijo a medios nacionales que su liberación se produjo por la presión que la Guardia Indígena efectuó en la zona donde lo tenían retenido, pues los comuneros inspeccionaron casa por casa, por lo cual sus captores lo llevaron a zona montañosa en límites con Huila.
Asimismo, explicó que cuando tuvo la oportunidad huyó de los disidentes de las Farc que lo tenían retenido y después de un largo recorrido encontró ayuda en una pequeña escuela.
También dijo que desconocía la noticia de la muerte de su compañero, pues durante el secuestro les manifestaron que sería dejado en libertad por lo que Onofre Jurado envió una carta a su familia.
Según el general Jorge Herrera, comandante de la Brigada 29 del Ejército, el secuestro fue ejecutado por las disidencias de la columna móvil Dagoberto Ramos de las Farc, que delinque en la Cordillera Central del Cauca.
Hay que indicar que a mediados de abril de este año en la vía que comunica a El Palo, Caloto, con el municipio de Toribío, los habitantes encontraron el cuerpo sin vida de Mauricio Bucheli López, quien fue raptado junto al ciudadano hoy liberado.
El hombre fue hallado amarrado con cadenas y heridas producidas por arma de fuego.
Por la liberación de estos ciudadanos los delincuentes que los tenían en su poder llegaron a exigir una suma de hasta 2 mil millones de pesos.