El Ejército y la Fiscalía entregaron nuevos detalles del crimen de la líder social Idaly Castillo Narváez, quien fue abusada y brutalmente asesinada en agosto del año pasado en el municipio de Rosas, al sur del Cauca.

Las autoridades informaron que además del cuñado y el esposo, presentados como implicados en el caso por el ente acusador desde Bogotá, hay otra persona involucrada.

El director seccional de Fiscalías en Cauca, Leonardo Vergara, narró que una de las hipótesis que manejan es un crimen pasional, pues establecieron que la ciudadana sostenía una relación sentimental con su cuñado Anelis Narváez Piamba, quien es acusado del homicidio.

El Funcionario explicó que unas prendas que este hombre había lavado fueron pieza clave para iniciar la investigación, pues en ellas encontraron restos de sangre que al ser corroborados con pruebas de ADN correspondieron a Idaly.

Al ser el primer sospechoso, las autoridades hicieron interceptaciones telefónicas, que les permitieron establecer que el esposo y el cuñado de la líder planeaban asesinar a los hermanos de la víctima, para lo que contrataron a un sicario de Timbío.

La Policía y el Ejército frustraron dos atentados, pues los familiares de Idaly fueron evacuados de la zona.

Las autoridades descartaron que el homicidio tenga relación con el liderazgo que ejercía la mujer en su comunidad, sino un asunto estrictamente personal.

Respecto al asesinato de la mujer, la Fiscalía reveló que además de ser abusada sexualmente, fue asesinada con puñaladas en el cuello y el pecho. Además, establecieron que la piel del rostro le fue quitada en su totalidad.

“Hubo disección del rostro y se descartó que hubiese sido por parte de animales, porque Medicina Legal establece que los glóbulos oculares estaban intactos”.

Al cuñado de la mujer la Fiscalía le imputó el delito de homicidio agravado. Además, junto a las otras personas investigadas, al esposo y al sicario contratado, les señalan de homicidio en grado de tentativa.

El comandante de la Brigada 29 del Ejército, general Jorge Herrera, dijo que se trató de un trabajo coordinado que permitió materializar las capturas en los municipios de Rosas y Popayán.

Texto: W Radio – Foto: Fiscalía