La supervisión diaria y monitoreo constante al sector conocido como Portachuelo del corredor vial Mojarras – Popayán, continúa a cargo del Instituto Nacional de Vías, Invías, donde se presenta una gran inestabilidad que afecta el talud inferior y superior poniendo en riesgo la permanencia de la banca.
Durante la semana anterior, Invías finalizó obras claves de drenaje donde se observa la disminución del movimiento en la zona, lo que ha permitido mantener el paso vehicular en el sector afectado con la debida señalización e informando a usuarios la precaución necesaria.
Tras el seguimiento constante en la zona por parte de especialistas del Invías se realizaron trabajos de mitigación para el control del contenido de humedad del bloque que soporta la vía, en el que se harán 9 baterías de drenes, cada una con 3 drenes, a una profundidad promedio de 30 metros (5 por debajo de la vía y 4 por encima). Además, se harán trincheras drenantes (filtros), a lo largo del canal en la corona del deslizamiento, cuya superficie se recubrirá con una impermeabilización para facilitar el flujo de agua y evitar la infiltración.
Como parte de los compromisos adquiridos por parte del Instituto en los próximos días se iniciará una exploración geotécnica con 5 sondeos hasta estrato rocoso, para dimensionar apropiadamente el volumen comprometido, la profundidad del plano de falla, detalles que darán un mayor conocimiento del fenómeno para decidir la segunda etapa de intervención a realizar.