YAMILET MINA, una negra alegre, trabajadora, sensual, solidaria, con todos los atributos de esa raza, que no conoce los dobleces, murió hoy a los 48 años, después que un infarto, obligara su traslado a la capital caucana. Era tan representativa de la comunidad, como las cantaoras, pues su oficio, es uno de los que dan identidad, a este pueblo pujante y laborioso : las totumeras, o trabajadoras del mate. Su sonrisa siempre dispuesta a alegrar los momentos de sus familiares y amigos, indiscutiblemente hará falta, en el discurrir tranquilo de la vida patiana. Representaba como ninguna, la fusión de los negros africanos, con nuestros sindaguas y caguazaras, que poblaron finalmente nuestro Patía. Tenía la alegria y la exuberancia de las mujeres afros, que asentadas en el ardiente valle, no permiten que sus brazos cayeran, porque el futuro apremiaba, y no la podía sorprender, sin lo suficiente, para sacar adelante, el propósito fundamental de su vida : la familia. Yamilet, deja dos hijos, a saber, DIEGO ARMANDO RENGIFO Y EDGAR GOMEZ. Así como sus hermanos, ARLY, COLOMBIA, WILSON, Y NIDER, sumidos en una profunda tristeza. Se fué muy pronto, esta pujante mujer. Paz en su tumba. Esperamos el acompañamiento, en su velación, y sepelio en el pueblo de Patía, Patía. Hoy y mañana.