Las comunidades del Movimiento Autoridades Indígenas del Suroccidente Colombiano, Aiso, llegaron al lugar en la madrugada de este viernes.
Luego de algunos actos simbólicos, derribaron el monumento del fundador de la capital de la República, en el marco de su lucha «para reivindicar sus derechos».
Es de recordar que, hace una semana, la misma comunidad derribó la estatua de Sebastián de Belalcázar en Cali, y meses atrás, ocurrió lo mismo con el monumento que existía en el Morro de Tulcán en Popayán.
Ciudadanos de Bogotá se solidarizaron con los Misak, una vez llegó la Policía Nacional a la escena.