A una comisión humanitaria fueron entregados los policías John Berlín Gómez Ocampo, Giovanni Bautista Calderón y el civil que fueron retenidos por la comunidad del Resguardo Indígena de Huellas, Caloto, tras ser sorprendidos en actitud sospechosa movilizándose en una camioneta en ese territorio.
La entrega se hizo efectiva luego de una asamblea en la que las autoridades tradicionales exigieron al Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía que establezca qué realizaban los funcionarios y el civil en la vereda Los Chorrillos en la noche del pasado martes.
El gobernador del Resguardo de Huellas, Nelson Pacue, dijo que las decisiones de la comunidad son la respuesta a la ola de violencia que se registra, no solo contra los indígenas sino también contra los campesinos, cuyas cifras de homicidio son altas en la región.
“(…) Sorprender a esta gente con armas y prendas de la Fuerza Pública, no deja de ser un peligro para nosotros por eso se procedió según nuestra costumbre, se destruyeron los elementos que ellos portaban y salvaguardar a los dos policías y el civil para luego entregárselos a la Defensoría del Pueblo y a la Personería”, señaló.
El personero de Caloto, Luis Moreno, dijo que los ciudadanos se encuentran en buenas condiciones físicas, y explicó que las comunidades decidieron incinerar las chaquetas, gorras, cargadores de celular, de computador, la ropa de mujer, 350 mil en efectivo, un machete, una loción, munición, dos armas de fuego, entre otros elementos que encontraron en el vehículo.
En la reunión se acordó que la Fiscalía investigue la situación y entregue resultados en dos meses. La Personería Municipal acompañará el proceso para garantizar transparencia.
El Gobernador Indígena dijo que si se comprueba que no son policías o que no realizaban labores propias de la Institución, exigirán que el caso sea regresado a la jurisdicción especial indígena para actuar según sus costumbres.
Se informó que los policías retenidos están adscritos a la Unidad Antinarcóticos de la Policía Nacional.
Foto: Colprensa