Así lo dio a conocer el director del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar en Cauca, James Ney Ruiz, que explicó que actualmenteg centran su atención en cuatro casos, en los que los menores han resultado afectados por manipular elementos pirotécnicos. Tres de ellos están en custodia del Instituto, mientras avanza el proceso.
“(…) Lastimosamente todavía continuamos con esta situación. Los casos se han presentado en diferentes municipios del Departamento, ya los asumimos y tenemos dispuestos equipos de defensoría, psicólogo, trabajador social y abogado, que están haciendo el proceso de protección y garantía de los derechos de los niños (…)”, dijo el Funcionario.
El Bienestar Familiar estudia las circunstancias en las que se produjeron los hechos y si se comprueba negligencia de los padres, procederá a instaurar las denuncias respectivas ante los órganos competentes.
“(…) Los padres deben tener la conciencia y la inteligencia de saber que son los primeros responsables de los niños y sus derechos en sus respectivas residencias”, agregó Ruiz.
El Instituto Nacional de Salud ha reportado a la fecha en Cauca un total de 41 casos de personas quemadas con pólvora, 19 de ellas menores de edad. Popayán es la ciudad con más casos con un total de 8, seguida del municipio de Toribío con 4 y Santander de Quilichao con 3.
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