NEGOCIACION

En medio de una lluvia de críticas, al Alcalde de Popayán, Cesar Cristian Gomez, por lo que la ciudadanía considera un manejo liviano del Hospital Universitario San José, el Alcalde encargado, Ricardo Montilla, logró empezar una negociación, que duró ocho horas, sin que pudiesen ponerse de acuerdo, en el punto más álgido por definir, cual es el de el reintegro de los trabajadores despedidos. El único acuerdo que se ha logrado es el de tasar en un 3% el aumento para la compensación económica que reciben los vinculados por la modalidad de contrato sindical, para ejecutar las labores que requieren los procesos del centro asistencial. Entre tanto, en los alrededores del Centro de Salud, de tercer nivel, mas grande del departamento, toda era bulla, consignas, arengas, protestas, por lo que se considera un abuso del actual Alcalde, al intervenir indebidamente, en los asuntos de manejo administrativo del Hospital, mas allá de lo permitido por el estatuto orgánico, que permite a la Junta Directiva dictar las normas superiores, de políticas de la empresa, y del acerbo espiritual de la misma, pero reservando las decisiones de tipo administrativo, que se expresan a través de los actos administrativos del mismo, al Gerente, lo que se violó al colocar una persona, para que contradijera las decisiones de su superior. Igualmente, las protestas, que se han dado en forma muy fuerte en las redes sociales, reclaman el cumplimiento de lo ordenado por la normatividad, de nombrar en el cargo de Gerente, a un Profesional de la Salud, o en su defecto, que tenga especialización en Administración Hospitalaria.

“Debido a que no hubo una solución por parte de la administración municipal en el tema de los 48 funcionarios despedidos, estos comenzarán un proceso jurídico con el fin de que sus derechos sean respetados como trabajadores”. Indicó Oscar Sánchez, sindicalista del Centro Asistencial.

Al mismo tiempo, Sánchez, resaltó que no aceptaron la propuesta de la administración municipal de recibir a 10 de los 48 funcionarios despedidos, ya que “esto es un falta de respeto contra los otros restantes, ya que todos son profesionales en lo que hacen y son importantes para el desarrollo del hospital”.