Un hombre identificado como Francisco Javier Martínez fue asesinado por su propio hijo, que en medio de una riña le propinó una herida con arma blanca en el norte de Popayán.

El joven de 17 años se encontraba en su casa en el barrio Olivares del Norte, consumiendo bebidas embriagantes y escuchando música.

Testigos indicaron que, su padre le llamó la atención en repetidas oportunidades, le solicitó que dejara de consumir alcohol y que bajara el volumen.

Los llamados ocasionaron una discusión en la que el adolescente tomó un cuchillo y le quitó la vida. Posteriormente, escapó.

El caso es materia de investigación.