La Fiscalía General de la Nación informó que se fortalece en el departamento del Cauca para enfrentar los nuevos retos que plantean el posconflicto y las organizaciones criminales.
En esta región, el ente acusador reforzó la tarea investigativa y la atención de las comunidades en los municipios de Popayán, con 12 despachos, El Tambo, Patía y Santander de Quilichao.
Asimismo, volvió a Toribío, municipio azotado durante 40 años por el conflicto armado y una de las zonas más afectadas por las 300 tomas guerrilleras registradas en este departamento.
La Fiscalía también llegó por primera vez a los municipios de Villa Rica, Caldono y Argelia.
En Argelia, la vicefiscal María Paulina Riveros encabezó la inauguración de la nueva sede que funciona en la Casa de la Cultura de este municipio, azotado por los rigores de la guerra entre las Farc, el Eln, y los grupos paramilitares.
“Como Vicefiscal General de la Nación me siento honrada de llegar hoy, por primera vez, al municipio de Argelia, Cauca. Todos sabemos que la apuesta del proceso de paz fue por llegar a los municipios más afectados por el conflicto, aquellos que sufrieron con mayor rigor los efectos de la guerra. Es lo que hemos conocido como la ‘Paz Territorial’”.
Riveros enfatizó ante el grupo de habitantes que participó en la apertura de la nueva sede, encabezada por su alcalde Diego Aguilar Marín, la atención de la Fiscalía a los requerimientos de la comunidad para acceder a la justicia, como un derecho inalienable.
De esta manera, el ente investigador pasó de tener 69 fiscales a tener 88 nuevos en Cauca.