Con vestimenta de tendencia negra, de luto, diez concejales de la ciudad de Popayán, emulando alguna fracción del Ku Klux Klan, en épocas relativamente recientes, decidieron decir no, a la presentación de Edgar Lopez Gómez, mas conocido en la guerrilla de las FARC, como «Pacho Chino», en el seno de la corporación, a la que ellos pertenecen representando a diferentes partidos o movimientos. La presentación, era para explicarle a la audiencia, entre la que se debía contar con ellos, los avances del proceso de paz, y sus consecuencias post-conflicto. Sinembargo, ellos tomaron la determinación de no atender al huesped, y se ausentaron, según explicaron para protestar por los muertos, y víctimas en general, del conflicto armado. Su decision, como es apenas obvio, levantó ampollas en el seno de la sociedad payanesa, en general porque no se comparte la posición de los ediles, y porque se consideró muy grotesca la forma de actuar.
Tiene su decisión relación alguna, con formas de pensar del pasado, para ejecutar una regresión?. Ellos, no lo han explicado así. A pesar, de afirmar que se trató de un simbolismo, algunos sectores, han creido que fué altamente imprudente, por el momento que vive el país, que está polarizado al máximo, y su actitud, pordría incitar a la violencia. «Fué falta de concordia, de voluntad de reconciliación, que no encuentro acorde con el ejercicio de la concejalía», dijo un asistente a la reunión que nos contó la forma como abandonaron la sesión. «Mas parece un show, con intereses politiqueros», anotó una señora que, segun ella por temor, no quiere que le identifique, ni se le describa. Queda mucha tela por cortar, en este intento de confección, que han acometido los concejales, por lo que estaremos de visitea, en el recinto del Concejo, para pedirles versión, a cada uno de ellos.