En medio de un multitudinario acto simbólico fue despedido en el Resguardo Indígena de Pioyá, municipio de Caldono, Cauca, el comunicador Eider Arley Campo Hurtado, asesinado por presuntos disidentes de las Farc en medio de un operativo de la Guardia.
Cerca de 2.000 personas asistieron al rito que las comunidades programaron, y con música le dieron el último adiós a este joven, que laboraba en la emisora de su comunidad, y que además se desempeñaba como guardia y artista.
Posteriormente se dio lectura a un comunicado a la opinión pública en el que se rechazaron los hechos ocurridos, pero ratificaron el compromiso de las comunidades en garantizar la estabilidad en sus territorios.
El cuerpo del comunero fue sepultado cerca de su vivienda en el marco de los usos y costumbres de las comunidades indígenas.
Es de recordar que por estos hechos fueron capturados nueve sujetos, quienes en una asamblea fueron condenados a 20, 30 y 40 años de prisión.