Integrantes de las comunidades campesinas e indígenas del municipio de Inzá, al oriente del Cauca, continúan con su protesta en la sede de la Compañía Energética de Occidente y mantienen retenidos tres vehículos y herramientas de contratistas.
Los manifestantes completaron cinco días en el plantón, y con el apoyo de la Guardia Indígena cumplen jornadas diurnas y nocturnas, con el propósito de exigir atención urgente para solucionar las fallas en el servicio de energía.
La líder Hilda Peña dijo en La W que las comunidades confían en que les brinden respuestas contundentes en una reunión que se llevará a cabo este martes a las 10 de la mañana, con funcionarios de la Compañía Energética.
“Seguimos en el paro, hay turnos en el día y en la noche; nos estamos turnando campesinos e indígenas. Los vehículos siguen retenidos, se hizo un inventario de lo que contenían (…)”, puntualizó.
Los afectados aseguraron que si las directivas de la Empresa no resuelven las problemáticas, el martes 19 de septiembre en horas de la tarde empezarán a movilizar comisiones para llevar a cabo manifestaciones en Popayán.
Por su parte, la Compañía Energética de Occidente denunció que personal operativo que cumplía sus labores fue retenido, impidiendo el libre desarrollo de sus funciones y el derecho al trabajo. Asimismo, expresó que los problemas obedecen a accesos irregulares a las redes, que generan inestabilidad en el servicio.
“(…) Hasta el momento han sido retenidas cinco brigadas de mantenimiento de la Compañía, que adelantaban labores para la protección y mejoramiento de la infraestructura eléctrica en bien de la comunidad”, agregó.
La Compañía rechazó las acciones e hizo un llamado a las autoridades para que se adelanten acciones que permitan la aplicación de la ley frente a estas situaciones. “Hasta que las condiciones de seguridad no sean garantizadas, no se adelantarán acciones operativas en esta zona del departamento”.
Tomado de W Radio