Comunidades indígenas del Cauca acompañaron el féretro del gobernador del resguardo indígena de Río Blanco Sotará, Alexander Oimé Alarcón, quien falleció tras ser baleado por sujetos desconocidos en el barrio El Empedrado, centro de Popayán.
Al homenaje asistieron masivamente líderes indígenas de la zona, familiares y amigos, quienes recorrieron las calles de la capital del Cauca hasta llegar a la sede de su cabildo, desde donde fue trasladado a su lugar de origen.
Organizaciones sociales le hicieron un llamado al Gobierno Nacional frente a recientes hechos que involucran a líderes campesinos e indígenas de la región, lo cual vulnera los derechos de las comunidades.
Durante la manifestación, líderes comunitarios reiteraron su preocupación por la circulación de panfletos firmados por grupos autodenominados “Los Urabeños” y Autodefensas Unidas de Colombia AUC, en cascos urbanos y sectores rurales de municipios como El Tambo, El Patía, Almaguer, Corinto, Santander de Quilichao y Caldono.
Los participantes exigieron que se garantice la protección de los defensores de los derechos humanos para que puedan ejercer su labor sin ningún tipo de inconveniente.
Es de recordar que las autoridades indígenas aseguraron que el homicida del Gobernador podría estar relacionado con recientes jornadas de control que había liderado en su comunidad, rechazando la presencia de actividades como la minería ilegal.
Las autoridades judiciales continúan con las investigaciones, pues el dirigente llevaba en su bolso una gruesa suma de dinero que sería invertida en un proyecto productivo, por lo cual no se descarta un caso de fleteo.
La Policía Metropolitana mantiene una recompensa de hasta 10 millones de pesos por información que permita ubicar a los responsables de este crimen.
Foto: Suministrada