El arzobispo de Popayán, monseñor Luis José Rueda Aparicio, rechazó la masacre de seis personas perpetrada en el corregimiento de La Betulia, zona rural del municipio de Suárez, en el noroccidente del departamento del Cauca.
“Tomamos las palabras del Papa Francisco y levantamos la voz de nuestras comunidades para clamar: ‘No a la guerra ni a la estrategia del miedo’”, aseguró.
En un comunicado, el prelado dijo que son enemigos del Cauca todos aquellos que están a favor de la indiferencia, el resentimiento, la polarización, el terrorismo, el narcotráfico, la corrupción, el abandono del Estado, la anticultura del miedo y la amenaza.
Además, hizo un llamado a los habitantes de la región para que reafirmen su vocación y compromiso por la defensa de la vida humana, aún en las diferencias.
También, pidió la solidaridad de todos para que denuncien “a los destructores de la vida”.
“(…) Hacemos un llamado a los habitantes de nuestros territorios rurales y urbanos del Cauca, para que reafirmemos nuestra vocación y nuestro compromiso en la defensa de la vida humana, que es única, sagrada, y que debe ser protegida siempre”, subrayó.
Agregó que está en juego el mayor patrimonio que es cada ser humano, está amenazada la Casa Común, se está deteriorando la democracia.
“Es hora de pasar a las obras que articulen la vitalidad de la sociedad civil y el Estado. Es hora de reconciliarnos para fortalecernos en el trabajo por la paz. Es hora de una política y una economía al servicio de la vida y de la paz. Es hora de una espiritualidad liberadora que construya unidad. Es hora de afianzarnos en la esperanza para seguir viviendo”.
Finalmente, aseveró que la Iglesia continuará su labor misionera en favor de todas las comunidades anunciando que el amor es más fuerte que el odio y que la paz es posible aún en medio de la adversidad.