El abogado Álvaro Casas explicó las implicaciones de la decisión de la juez encargada del caso del Alcalde de Popayán, quien decidió no dictar medidas de aseguramiento como lo solicitó la Fiscalía.
- El Juzgado Primero Penal Municipal tomó la decisión de no imponer medida de aseguramiento al señor Alcalde de Popayán y las otras seis personas que fueron imputadas por la Fiscalía General de la Nación, por la presunta comisión de varios delitos, con motivo de la campaña «Popayán te abraza».
- El Despacho Judicial consideró que la Fiscalía no aportó suficientes elementos materiales probatorios para apoyar la solicitud de medida de aseguramiento de los ciudadanos imputados.
- El señor Fiscal interpuso y sustentó el recurso de apelación, con la coadyuvancia del Representante de la Víctima, que será resuelto por un Juez Penal del Circuito, decisión que puede tardar más o menos un mes.
- En la argumentación del Fiscal se resaltaron varios elementos materiales probatorios que habían sido aportados en debida forma y no fueron valorados por el Juzgado.
- También se manifestó el señor Procurador Delegado, como Agente del Ministerio Público, quien desde su primera intervención se mostró en desacuerdo con la imposición de las medidas y así lo ratificó en su pronunciamiento.
Lo que sigue:
La decisión del Juzgado no es una exoneración, porque el proceso penal continúa, con dos opciones que tiene la Fiscalía: solicitar preclusión o formular acusación; en este último caso, deberá hacerlo en una nueva audiencia, ante un Juez Penal del Circuito con Funciones de Conocimiento, por la clase de delitos imputados.
Posteriormente, en la audiencia preparatoria, deberán descubrirse las pruebas que se harán valer y en el juicio oral, se dará el debate de pruebas y argumentos entre la Fiscalía y la Defensa, para que el Juzgado de Conocimiento anuncie el sentido del fallo; en la última audiencia se hará la lectura de la sentencia, que podrá ser condenatoria o absolutoria.
Como representantes de la Víctima, continuaremos la labor de actuar con dignidad y respeto, en procura de la verdad, justicia y reparación integral, que se deben buscar en todo proceso penal.
Por Álvaro Casas