Organismos de socorro intentan ayudar a miles de personas que resultaron damnificadas en Ecuador tras el fuerte sismo que produjo al menos 246 muertos, más de 2.527 heridos y destrozos considerables en varias provincias costeras y zonas turísticas.
El Gobierno de Colombia indicó que entre las víctimas de este fenómeno natural hay cinco connacionales.
Entre tanto, el vicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, reportó que se han presentado más de 189 réplicas de distintas intensidades luego del terremoto de magnitud 7,8, ocurrido este sábado.
Una de las ciudades más afectadas es Portoviejo. Allí se encontraron casas destruidas, postes de energía derribados en las calles y escombros esparcidos por las vías, donde decenas de habitantes decidieron pasar la noche.
Las autoridades informaron que el terremoto, el más fuerte desde 1979, tuvo una duración de aproximadamente un minuto.
«Barrio Tarqui de Manta muy afectado. Pedernales destruido. Vicepresidente se dirige a Portoviejo», dijo en Twitter el presidente Rafael Correa.
De acuerdo a versiones entregadas por los gobernantes del vecino País, en el transcurso de estas horas llegarán ayudas de Chile, Colombia, Centroamérica, España y personal especializado en rescate. Se ha descartado la alerta de tsunami.
El Papa Francisco pidió por los ecuatorianos durante su oración de Regina Coeli.
«Un violento terremoto ha golpeado a Ecuador, causando numerosas víctimas y graves daños. Roguemos por su población. Que la ayuda de Dios y de sus hermanos les dé fuerza y consuelo», expresó.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, envió un mensaje de solidaridad a los ecuatorianos y ofreció la ayuda necesaria para afrontar la emergencia causada por el terremoto.
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