La expansión de la variante delta del Sars CoV-2, con su capacidad de contagio más elevado con respecto al coronavirus original, ha puesto a dudar a los expertos sobre las previsiones que inicialmente se habían hecho sobre la cobertura de vacunación necesaria para alcanzar la inmunidad colectiva.
De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció que esta podría ser superior al 70 por ciento no solo por efecto de la variante delta encontrada en la India, sino también por acción de sus homologas alfa, beta y gama (variantes de preocupación) que han demostrado tener mayor capacidad de transmisión y reducir potencialmente la efectividad de las medidas recomendadas para contener la pandemia.
Aunque la OMS no especifica cuál debería ser el porcentaje mínimo de inmunización para disminuir la transmisión viral, algunas voces la sitúan alrededor del 90 por ciento-nivel con el que coincide Alejandro Gómez, secretario distrital de Salud y que de acuerdo con el salubrista Pedro León Cifuentes no se podría alcanzar sin vacunar a los menores de 12 años, para los que aún no existen biológicos probados y que en Colombia serìan el 20,09 por ciento.
Según Cifuentes, hay que aclarar que la inmunidad de rebaño no es un componente teórico, sino que está basado en la evidencia mostrada en el control de enfermedades transmisibles conocidas como el sarampión, la difteria y que esto permitió eliminar la misma viruela que hoy la humanidad considera erradicada.
“Esta protección colectiva se logra cuando un suficiente número de personas inmunes a un virus garantizan que este no pueda propagarse en razón a que si un apersona se infecta y la mayoría no son susceptibles de recibirlo, tenderá a desaparecer como agente de preocupación y al mismo tiempo se impide que se vuelva más agresivo”, dice el salubrista.
Carlos M. Pulido, experto en salud pública, insiste en que el porcentaje de la población necesario para alcanzar esta inmunidad de rebaño no es constante y que depende de muchos factores entre los que están la capacidad de contagio del virus y la susceptibilidad que tienen las personas a contagiarse y en el caso del nuevo coronavirus, dice Pulido, es claro que con la aparición de las nuevas variantes esta capacidad se ha modificado, al punto que con la delta se ha cuantificado que esto se multiplica incluso hasta diez veces con respecto a la forma original del virus.
Lo dicho por el experto se verifica con un informe del Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) dado a conocer la semana pasada por el Washington Post, en el que advertía que una persona afectada con la variante delta puede infectar a otras nueve, tanto que comparó su nivel de contagio con el de enfermedades tan agresivas como el sarampión y la varicela.
Y en ese sentido, si en un comienzo se daba por hecho – de acuerdo con los expertos- que la inmunidad colectiva requerida para limitar la transmisión del nuevo coronarivus original que apareció en Wuhan (China), era del 70 por ciento, Cifuentes recalca que hoy dentro de la lógica este número tiene que ser superior.
Pulido llama la atención en que fijar la meta de inmunización sobre un porcentaje que garantiza inmunidad colectiva puede generar falsa seguridad dado que la dinámica que ha mostrado la pandemia con su alto nivel de incertidumbre exige concepciones más realistas.
“El Sars CoV-2 ha demostrado ser muy distinto a otros virus causantes de enfermedades conocidas sobre los que se fundamentó el concepto de inmunidad de rebaño y sobre las cuales tiene validez, pero aquí se requiere empezar a pensar diferente”, remata el especialista en salud pública.
Y no le falta razón si se tiene en cuenta lo dicho por la misma OMS que propone coberturas que al bordear el 90 por ciento se convierte en una inmunización casi universal, algo que de acuerdo con Cifuentes, es una meta muy difícil si se tiene en cuenta la falta de disponibilidad de biológicos en muchos lugares del mundo y la resistencia a vacunarse, como se ha demostrado en algunos grupos poblacionales en Colombia.
A lo anterior se suma, dice Pulido, que si la variante delta puede multiplicar el número de infecciones, esto puede afectar también a personas ya vacunadas que no tengan los esquemas completos o que incluso teniéndolos, terminen por desarrollar una enfermedad leve, que no impide que el virus se siga transmitiendo.
En ese sentido, los expertos insisten en que por ahora es mandatorio vacunar al mayor número de personas en el menor tiempo posible, fortalecer los protocolos de bioseguridad, independientemente del nivel en el que se encuentre la pandemia.
(vía eltiempo.com)