Desde marzo de 2016 la Fiscalía General de la Nación se dio a la tarea de perseguir a una organización de la que tres de sus integrantes enviaban cocaína a Estados Unidos y los cuatro restantes distribuían marihuana en Colombia, que sacaban desde Corinto, Cauca, hasta Buga, Valle del Cauca, para su posterior distribución.
El trabajo, realizado por la Dirección de Fiscalía Nacional Especializada Antinarcóticos y Lavado de Activos (Dfala) en coordinación con la Oficina en Colombia del Servicio de Aduanas y Emigración de los Estados Unidos HSI/ICE y la Dirección de Investigación Criminal e Interpol, permitió las capturas en el Valle del Cauca de Damaso Vente Bonilla, el 3 de marzo de 2016, en el Aeropuerto Internacional Alfonso Bonilla Aragón de Palmira, y el 17 de mayo de ese año las de Jairo Valencia Mina en Cali y de Silvio Segundo Micolta Sinisterra en Buenaventura.
Los tres ciudadanos fueron requeridos con fines de extradición para comparecer en la Corte Distrital de los Estados Unidos, para el Distrito Medio de Florida, por cargos de concierto para distribuir cinco kilogramos o más de cocaína, en ese país desde Colombia a través de países como México.
El 25 de julio de 2016 el Gobierno autorizó la extradición de Damaso Vente Bonilla, el 10 de noviembre del mismo año la de Jairo Valencia Mina y el 26 de octubre, la de Silvio Segundo Micolta Sinisterra.
Durante la investigación, fue detectado un apéndice de esta organización que mantenía contacto con los extraditables y que por su cuenta se dedicaba a la comercialización de marihuana producida en Corinto, dirigida por una persona conocida con el alias de Leo, quien adquiría, vendía y ofrecía sustancias estupefacientes, que eran trasladadas desde su lugar de producción hasta Buga en 5 motocicletas. En cada viaje transportaban 10 kilos.
Esta investigación permitió las capturas de Fernando Tovar Casallas, Leonel Toro Calambás y Roberto José Salcedo Restrepo, a mediados de abril del año pasado en Buga, quienes aceptaron cargos por tráfico de estupefacientes y concierto para delinquir, por ello fueron condenados a 48 meses de prisión.
Este 10 de mayo la Policía de Vigilancia de Cali capturó a Wilder Caicedo Ocampo, el último presunto integrante de la organización, contra quien pesaba una orden por los delitos de tráfico de estupefacientes y concierto para delinquir. Según la investigación era el encargado de prestar la seguridad durante el transporte de los narcóticos desde Corinto hasta Buga.
Ante el Juez 26 con función de control de garantías de Cali, Caicedo Ocampo aceptó cargos y fue cobijado con medida de aseguramiento de detención preventiva en centro carcelario.
Foto: Wilder Caicedo Ocampo – Fiscalía