Así lo denunció la Compañía Energética de Occidente, al indicar que en el marco del plan de intervención programado para la normalización de las conexiones no autorizadas que afectan el servicio de energía en este municipio, se han presentado graves inconvenientes que dificultan la realización de los trabajos.
“Según la información suministrada por la misma comunidad del sector, habitantes de la zona desinstalaron e incendiaron un reconectador, amenazando a los moradores de la zona para que nadie hiciera presencia en el sector”, aseguró la Firma.
Agregó que a pesar de existir acuerdos realizados conjuntamente con las autoridades municipales e indígenas, la comunidad falta al compromiso entorpeciendo los trabajos programados.
“Estas acciones vandálicas de constante intervención de terceros a la infraestructura eléctrica, impiden que se materialicen las mejoras en la calidad y continuidad del servicio”.
En varias oportunidades, la Compañía ha informado a la opinión pública que los inconvenientes con la prestación del servicio corresponden a efectos derivados de conexiones ilegales que producen sobrecargas en los circuitos, los cuales, provocan interrupciones del servicio con las correspondientes afectaciones a la comunidad.
“En el momento en que el tamaño de las conexiones ilegales hace que actúen las protecciones del circuito, se interrumpe el servicio para proteger la seguridad del sistema y los habitantes de la zona”, agregó.
Voceros de la Compañía afirmaron que debido a la falta de garantías y deficientes condiciones de seguridad para que el personal técnico pueda desplazarse y adelantar las gestiones sin contratiempos, no es posible cumplir con los compromisos operativos en el sector.
Foto: Compañía Energética de Occidente