Un juez dejó en libertad a cuatro jóvenes que habían sido capturados por la Policía Metropolitana de Popayán en medio de los desórdenes que protagonizaron durante la visita del expresidente y senador Álvaro Uribe Vélez.
La Fiscalía General de la Nación los judicializó por su presunta participación en el delito de asonada, pero quedaron en libertad por no ser una infracción que amerite cárcel.
Estos ciudadanos fueron detenidos por las autoridades cuando se registraban las violentas protestas en la sede de un candidato del Centro Democrático. Aunque no fueron privados de la libertad, seguirán vinculados al proceso judicial.
Organizaciones defensoras de derechos humanos rechazaron las detenciones y aseguraron que denunciarán los hechos ante los organismos correspondientes al considerarlas arbitrarias.
Mientras tanto, el comandante de la Policía Metropolitana, coronel Pompy Pinzón, dijo que no permitirán las alteraciones de orden público contra campañas políticas, cualquiera que sea.