Se incrementa la preocupación en Cauca por los anuncios de un paro armado por parte del Ejército de Liberación Nacional, Eln, y la circulación de panfletos amenazantes en el municipio de Corinto, firmados por ese mismo grupo.

Recientemente se conoció un escrito en el que se indica que el Eln hizo presencia en las zonas rurales de este municipio, una vez se firmó el acuerdo de paz entre el Gobierno y las Farc. Asimismo, aseguran que efectuarán acciones violentas contra delincuentes.

Esto se suma a la orden de paro armado nacional confirmada por el comando central del Eln, argumentado en “la negativa del Gobierno para darle continuidad al quinto ciclo de conversaciones en Quito”.

Así las cosas, se anunció que todas las estructuras del País fueron orientadas a cumplir dicha orden a partir de las 6 de la mañana del sábado 10 de febrero hasta las 6 de la mañana del martes 13.

En el escrito se afirma que en el occidente colombiano el paro será efectivo en las carreteras, ríos, el mar y las rutas aéreas, por lo que se solicitó a los transportadores y pasajeros abstenerse de viajar y evitar inconvenientes.

Al respecto, el comandante de la Brigada 29 del Ejército, general Jorge Herrera, dijo que junto con la Policía y la Fiscalía General de la Nación se adoptaron las medidas correspondientes para brindar seguridad en todo el departamento.

Asimismo, explicó que se han realizado consejos de seguridad en todos los municipios y anunció que se mantienen los operativos en contra de las estructuras del Eln que delinquen en la jurisdicción.

“Hemos tenido resultados contra sus finanzas, neutralizaciones de material explosivo en algunos sitios y seguimos avanzando, esa es la tarea nuestra podemos dar un parte de tranquilidad a la comunidad”.

Por su parte, el comandante del Departamento de Policía Cauca, coronel Edgar Rodríguez, dijo que activaron los protocolos correspondientes para evitar que la Fuerza Pública, las comunidades y la infraestructura sean objeto de acciones violentas.

En el Cauca, la presencia del Eln se concentra en el sur, el Macizo Colombiano y la Costa Pacífica, donde la Fuerza Pública adelanta operaciones de control militar.