Nota editorial sobre las agresiones a periodistas, por parte de manifestantes indígenas que no respetan ni siquiera, los logos o las banderas, o los símbolos de las empresas que son respetados en todo el mundo. La situación con los indígenas caucanos, han llegado a un punto de insostenibilidad, so pena de desbocar en una violencia indiscriminada, pues los ánimos de sectores que se sienten afectados, que han expresado su inconformidad al gobierno, que han solicitado la protección y esta no se ve por ningún lado, están demasiado caldeados. Hay que re-definir la relación Estado-ciudadanía indígena-afro y mestizos. Los abusos y las agresiones, cada vez son mas frecuentes y mayores. El desprecio por la constitución nacional y las leyes, por parte de líderes y manifestantes de base hace del sector aborigen, hace que el resto del caucanos, se sientan humillados y abusados por quienes, ya han dado la forma de una agrupación para subvertir, ya no salen a una manifestación pacífica sino, armados con objetos no convencionales, que son, tan o mas, peligrosos que las armas convencionales.